La mujer y las MisIones
Cuando Dios pensó en crear al mundo, pensó en el hombre y también le dio una compañera
con la cual pudieran llevar adelante el propósito de Dios .El en su infinito poder pudo haber
llenado la tierra, pero no lo hizo.
Dice su Palabra en Malaquías2:15 “ ¿No hizo él uno, habiendo en él abundancia de espíritu?
¿y por qué uno? Porque buscaba una descendencia para Dios.”
El busca una descendencia para El. Y esta viene a través del servicio y del cumplir la
comisión que él nos dio antes de partir de esta tierra. Y, ¿Cómo puedo yo ser parte de la búsqueda de una descendencia para Dios?
Veremos dos formas de lograrlo:
1. Con diligencia y en sumisión a Dios, y esto se manifiesta al llevar adelante el
servicio como Dios dio ejemplo:
~ Con diligencia en amor por los perdidos, Dios mostró su amor al enviar a su
hijo, a morir por nosotros, el amor siempre da, el amor sirve I Cor 13:5.
-siendo consciente de esta labor.
-buscando la mejor forma con la ayuda de Dios y su Palabra para llegar a
ellos.
~ Con obediencia a la Palabra de Dios, el servicio a Dios implica obedecer a sus
Mandamientos y llevarlos a la práctica Sant.1:22.
-Nuestra motivación en obediencia a Dios debe ser nuestro amor a él.
-Nuestra obediencia debe manifestarse en hacer lo que él nos dejó como ejemplo para alcanzar la descendencia que seria para él.
~ -Consagrando tu vida cada día para él, buscando su ayuda y dirección.
-Presentándote limpia y dispuesta a su palabra. Rom12:1
-Evaluando tu vida, servicio y adoración a Él.
-Considerando que sin él no alcanzarás esta gran misión. Juan 15:5
2. El lugar donde tú te encuentras:
~ Tu Hogar: Aquí está la prueba de fuego de cada creyente. Tú debes enseñar a
los pequeños con creatividad la palabra de Dios, debes llevar adelante el altar
familiar, este esfuerzo fiel y constante por criar a tus hijos en disciplina y
amonestación del señor. Y Tu testimonio que será mucho más fuerte que tus
palabras delante de tu familia inconversa.
~ Tus amistades: Donde tú te desenvuelves cada día. Hay mujeres que trabajan. Donde tu estas, ¿Saben las personas que eres cristiana?, Tienes la
escuela de tus hijos , ¿cuántos padres de familia conoces allí? Tienes el
mercado, la casera, la vecina de la tienda donde haces tus compras cada día.
~ En los negocios: Acuérdate de Lidia que era comerciante, Dorcas que era
costurera, de Priscila que trabajaba con su esposo haciendo tiendas, todas
ellas no dejaron de cumplir con el mandato de Dios de anunciar el evangelio
allí donde ellas estaban trabajando.
Hermana mía Dios es fiel a su palabra y el cumplirá su propósito en ti. Él te llamo a
cumplir una misión, seamos fieles, en nuestra diligencia, obediencia, sumisión y
consagración en esta labor de ser parte de una descendencia espiritual para nuestro
Dios.